Llegados a Delhi desde Varanasi en vuelo de 60 minutos, nos esperaba una promenade de rutas de mas de 4 horas. Llegada a Agra en la noche para alojarse y descansar. Temprano al otro dia visita al Taj Mahal, joyita de la arquitectura mogola en India. El emperador Sha Jahan fue un prolífico mecenas, con recursos prácticamente ilimitados. Bajo su tutela se construyeron los palacios y jardines de Shalimar en Lahore, también en honor de una de sus esposa. Mumtaz Mahal, la preferida, dio a su esposo catorce hijos, pero falleció en el último parto y el emperador, desconsolado, inició casi enseguida la construcción del Taj como ofrenda póstuma. Todos los detalles del edificio muestran su naturaleza romántica, y el conjunto hace alarde de una estética espléndida. El complejo se ubica rodeado de un gran chahar bagh que mide 320 x 300 metros e incluye canteros de flores, senderos elevados, avenidas de árboles, fuentes, cursos de agua, y piletas que reflejan la imagen de los edificios en el agua. Nota: en mogol "Jardín" y "Paraíso" comparten el mismo vocablo.
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